AMIMANERA, Siete canciones, por Juan Ángel Sánchez

Te propongo, cuarentón anclado en la música de los ochenta o de los noventa del pop rock español, una tournée por siete canciones actuales que si no aprecias es que no tienes corazón. Llevo tiempo oyendo la frase que escuchaba a mis mayores “ya no se hace música como la de nuestros tiempos”. Lo más sangrante es que ahora lo proclaman mis colegas que, además de comenzar con una esposa llamada presbicia, han quedado varados en el pasado como la sirena de Héroes.

La forma adecuada de leer este artículo es reclinarse en tu sillón favorito de tu rincón exquisito, abrir Spotify y escuchar, con el volumen bien alto (incluso que moleste un poco) las canciones que te voy a ir exponiendo.

Comienzo con el fin del mundo. ‘Finisterre’. Vetusta Morla, el grupo que más sonará a los ajenos a la música de ahora nos regala un himno a la importancia del amor en la vida. “Ya me da igual si la tierra es plana, si arden los bosques o si hierve el mar... qué más dará, cuando tú andas cerca, queda en suspenso la gravedad”. Otra forma más explicita de exponernos la elevación nos relata Miss Caffeina con su ‘Mira como vuelo’. Transmiten una energía positiva que ya querrían muchos libros de autoayuda. De lo terrenal y del amor también habla ‘El mundo’ de Love of Lesbian con frases que rozan la lírica más refinada: “A veces pienso que los árboles lo hacen, mueven sus hojas a la vez, y así crean este viento, sé que algunos dicen "no es así", doy fe que un beso crea latidos, como tu abrazo, que genera, en mi alma el mismo efecto

que un par de electro-shocks… Piensa que el mundo, a veces por un segundo, deja de ser absurdo si en medio estamos tú y yo”.

Los grupos murcianos tienen un apartado especial por cantidad y calidad. El descubrimiento más reciente es Arde Bogotá y me quedo con ‘La salvación’ que, según me cuentan, escribieron a consecuencia del suicidio de un amigo. “Tiene que haber una salida, tiene que haber una salida, tiene que haber una, para tanto dolor…y ahora sé que la salvación estaba dentro de un beso, de una caricia en el pelo de aquella noche en el espigón. La salvación, de tantos dioses modernos, no me compensa el momento, de haber tenido que decir adiós…”

Viva Suecia, otro grupo pimentonero con ‘El Bien’ aconseja “A veces las cosas se arreglan si asumes que nadie las puede arreglar. Solo duele porque crees que importa. No se va a curar y qué más da. No te creas lo que dicen los cantantes. No hagas caso a la mitad de lo que ves. La verdad es que nada es tan importante”. 

Y concluyo la trilogía murciana con Second y su ‘Rincón exquisito’, manifiestan que “desde aquella habitación, desde aquel rincón tan exquisito lanzamos un mensaje para todo el universo…” y vaya si lo lanzan. Escucharla en un lugar apartado admirando la Vía Láctea sería lo más apropiado. Es de esas canciones que te elevan e insuperables en la carrera de un artista.

La razón de intentar crear acólitos de los artistas actuales es por un amigo que, después de una pérdida familiar muy cercana y paralizante, me pidió lo siguiente: “Juan, tú que escuchas música de ahora, podrías aconsejarme grupos interesantes. Resulta que la que me gusta de los noventa me trae continuos recuerdos de esta persona que marchó, y necesito crear unos nuevos, con gente actual que me ayude a reiniciar mi vida…”.

Termino con Shinova y ‘Te debo una canción’. Dejaré que hable ella misma:

“Últimamente pienso demasiado, en todo lo que tengo, en todo lo que he dejado,

en lo bueno, en lo malo, y cuestiono lo que creo hasta que alguien cree en mí y

se evapora el desconcierto”.

Últimamente pienso demasiado, en mi padre y en todo ese tiempo que nos ha faltado,

en mi madre y su ejemplo de roca contra el viento, he sido complicado desde el nacimiento, últimamente pienso en el primer amor, lo mágico que fue y lo poco que duró, no olvido que te debo una canción, te debo una canción.

Gracias por tanto, por la risa y el llanto, gracias por ser parte de mí, gracias por tanto, por dulce o por amargo, gracias por ser parte de mí, por ser parte de mí”.

Y recuerda… que si lees el artículo y no escuchas las canciones es como el que tiene tos y se rasca los huevos.