EL ARCO DE ODISEO. Fantasía desechable, por Marcos Muelas

Las luces dejan de parpadear, en las calles se abandonan los árboles que han presidido estas fechas y empiezan los eternos listados de futuros propósitos de año nuevo. Y es que, la Navidad, ya toca su fin. Una época ligada a la fantasía. Un retorno a la niñez. Días en los que nos reunimos con la familia y amigos para intentar disfrutar de esa felicidad tan publicitada, comemos juntos e intercambiamos regalos. Días de tradiciones. Las horas corren mientras nos deleitamos haciendo un repaso de la ya mítica Mary Poppins y otros clásicos de Disney cargados de magia y fantasía. Los que antaño fueron niños, ahora son padres que intentan inculcar el apego que sintieron por estas joyas y por un momento, ellos mismos experimentan una regresión a su infancia, donde disfrutan de esas películas como hicieron el primer día. En estas historias aparecen seres fantásticos. Seres que a los pequeños protagonistas no les cuesta asimilar su existencia. Por su parte, el personaje adulto h...