Entradas

Mostrando entradas de diciembre, 2023

SUMARIO DEL 17 DE DICIEMBRE DE 2023

Imagen
 ¡Salud y República de las Letras! Cumplimos un año de amistad literaria y afrontamos de nuevo ese breve, pero difícil, período vacacional que antiguamente llamábamos navidad. Antes de ir hacia la vorágine de comidas, banquetes no deseados, actos de consumismo injustificables, ignorancia del mal ajeno, al menos dejemos un resquicio por el que se cuele esa conexión con la tierra y con el tiempo cósmico que había, antiguamente, muy antiguamente, en estos días de diciembre. Tan poderoso fue el concepto de renovación, de resurrección frente a la oscuridad, que incluso todo un Dios se encarnaba estas fechas, haciéndose de carne y hueso; abandonaba la cima de su monte, su papel de justiciero implacable y vivía entre los simples y débiles humanos.  Arcimboldo, El invierno Son tiempos pasados. Al menos algo de transcendencia queda en vosotros, lectores dulcíneos. Aquí tenéis las aportaciones de Charo Guarino, defensora de la cultura clásica; de Rafael Hortal, quien sabe bien cómo encontrar un

MINUETO. El fantasma, por José Antonio Molina

Imagen
Estos días acontece la tradicional visita de los espíritus de las navidades. Rara vez sucede, como en el célebre relato, que vengan tres espíritus en una sola noche por riguroso orden cronológico. Lo normal es recibir a uno, quizá dos. Raramente vienen los tres. El común de los mortales jamás recuerda haber recibido visita alguna. Cuando todos los días son iguales no se añora la infancia. Arrastrado por la corriente, importa bien poco el presente. Sin esperanza de futuro, nada significan las jornadas venideras. Pero descartada la experiencia onírica, el caso es que los fantasmas vuelven y hay cierta casuística al respecto. Es más frecuente la visita del fantasma de las navidades pasadas, seguido en ocurrencias absolutas por el de las navidades presentes; una estadística sorprendente que sugeriría que el fantasma de las navidades futuras no existe en realidad y que este no es sino una invención. Los números y el más frío e irrebatible de los análisis cuantitativos parecen avalar dicha h

EL VERDE GABÁN: Mocedades de don Quijote (el Quijotillo). Entrega 16.

Imagen
Acabaron de aderezarme el carro, con el muertito adentro, y me instaron a salir. Aún no amanecía. Un resplandor apenas asomaba por oriente. Yo tomé el camino contrario, por donde sabía que se hallaban esas arboledas que mausoleo habrían de ser del imprudente Simón, el pelirrojo. No le puse cruz, pero fice una incisión en la tal forma, en pino, ni cercano, ni lejano a la precaria tumba de Esteban. Con eso, le bastó a mi conciencia para quedar en paz con él. Luego, busqué dónde vender la leña del finado. Con eso, hice algunos dineros, y así, hasta hoy. Nunca me acerco al Bosque del Muerto, que yo lo llamo, por evitar fantasmas. Más tarde supe que los pelirrojos traen mal fario. Y es que se sabe, o se cree, que Judas, el apóstol que vendió a Cristo, era pelirrojo y bizco. Mero maltrato verbal a los que son diferentes a los más, el resto de nosotros, que nos autodenominamos, algo vanidosamente, como normales. No te digo más.  Empero, a mí me trató bien. Me enseñó cosas, como que un arriero

PASADO DE ROSCA: Tamales de chivo, 5. Flori

Imagen
  —Pues francamente, me parece un poco infantil aferrarte a esa imagen de Jenaro como un marido modélico y dar la espalda a la realidad que te ocultaba. —¿Y qué quieres que haga? ¿Que me atormente pensando que estaba viviendo con un hombre que no se parecía nada a la imagen que yo tenía de él? Ahora soy consciente de que es muy cobarde, y su cobardía lo ha llevado finalmente a huir de su país para no afrontar las consecuencias penales y la vergüenza por todo lo que ha hecho. Imagínate cómo me miran en el bufete. Es más, estoy casi segura de que en su refugio mexicano ni se ha parado a pensar en lo que ha dejado aquí y de que incluso no nos tiene presentes ni a mí ni a su hijo.  Por eso, el día que se despidió de nosotros no pude evitar que me viniera a la mente la frase esa: “hoy es el primer día del resto de mi vida”. —Pues sí, pero en cierto modo tú lo has tenido más fácil, Flori. Él se ha ido y te has hecho cargo de ti y de tu hijo, ya está. Te deducen una parte de lo que cobras, sí

CRONOPIOS. Encuentro con Zezé, por Rafael Hortal

Imagen
  Descubrí a Zezé en la revista Náyades, era sicalíptica mucho antes de que se inventara la palabra, porque encajaba en la definición que surgió a principios del siglo XX para adjetivar a las pícaras cupletistas de Madrid.  Emilia del Cerro, conocida como la bella Zezé, siempre será una joven hermosa, alta, elegantísima, trigueña, con grandes ojos negros. Así la definía su creadora, la cartagenera Ángeles Vicente García cuando escribió la novela de género bildungrosman , en la que Zezé le cuenta su vida a una escritora —sin duda, alter ego de la autora de la novela— durante un viaje en un barco de vapor desde Buenos Aires a Montevideo en 1909.                                                 Me interesaba profundizar en los sentimientos de la bella Zezé, conocer sus secretos con la esperanza de realizar un biopic algún día. Cuando conseguí llegar a la plaza de Chueca sorteando la multitud, la vi sentada en una cafetería admirando como se mostraban con orgullo un grupo de sus paisanas m

CUADERNO DE NAUFRAGIOS: IV. The Nemesis of Neglect, por Vicente Llamas

Imagen
La conjura de los necios, su asalto a la geometría y la teología del mundo que forjaron esforzados espíritus, es más devastadora imbuida de desprecio e ingratitud, porque no es el orden extemporáneo que anhela Naphta, la moral apolínea sustentada en ocluidas categorías que abocan al individualismo anónimo y colectivo , sin organización social, sin servidumbres, leyes ni castigos, la disolución que el excéntrico Reilly ansía con la ironía lineal de una quebrada caricatura y la vida desperdigada por una habitación ambulante.  Me asombra la connotación negativa del calificativo «decimonónico». La ligereza con que se tilda de anacrónicas bajo esa consigna a tantas cosas. Los modernos pedagogos sociales, ufanos colonizadores de estos días ocres, censurando continuamente viejas fórmulas y métodos que juzgan caducos con la impune arrogancia de los ilusionistas. Es una suerte que esta raza goce de tan excelente salud y no esté en vías de extinción… Qué haríamos sin sus oportunas indicaciones