CLASE DE LENGUA Y LITERATURA, Los acentos, por Santiago Delgado

Cuando yo empecé a estudiar gramática en el Bachillerato, la palabra acento se refería tanto al ortográfico como al sonoro (luego, éste último se llamó fonético; bien); pero al primero, al que se escribe, comenzaron a llamarle tilde. Esta palabra, tilde, en aquellos tiempos de mi pubertad, se usaba solo para el garabatillo de la eñe. La invasión fue imparable. Hoy, hay que llamar tilde a todo acento presente en la escritura. Vayamos, pues, con las tildes. Para empezar, una norma, si se quiere dogmática: la palabra verbal “fue” no se acentúa nunca. O dicho a la moderna, no lleva tilde nunca. Veamos, hay dos tipos de acentos ortográficos: los fonéticos y los diacríticos. Los primeros han de traerse aprendidos de la Escuela. Los segundos, no. Observen que no se han mencionado los acentos enfáticos. Es el caso de “fue”. Únicamente porque con el énfasis se ha dejado su cuidado a los signos de exclamación: “¡!”. No hay énfasis en medio de las palabras. Y no es el caso del afirmativo “s...