Dos poemas de Concha Lavella

El grito de las cosas perdidas empuja. Salgo del Maquinal miedo engaño loco, certeza, industrial inercia. soledad_ destierro. El grito de as cosas perdidas en eco llama a la verdad, alma, cristal Donde antes gobernaba el miedo en la obedecida tirania. Desciende su materia Ya sin nada Anuncia su caida Vacía Amanecida en silencio camina, suspira nueva. Liberada ya se ama. Da violetas en el bosque Los aires se cruzan y danza. Es un nuevo territorio Su nombre es dulce estrella hilvanada. Los dioses le invitan al fuego donde arde lo siniestro. Purifica su silueta es "un ya nada pueda abusar de ella". Palabras en lo alto Una mano en mi cabeza, La otra agarrando mi maleta Dejo las llaves sobre la mesa. Tu camisa y pantalón sobre la silla Miro hacia la ventana Veo mi silueta correr por el jardín. Sólo un paso más. ...