EL ARCO DE ODISEO, Bullet Train, por Marcos Muelas

Cinco peligrosos asesinos suben al tren en la estación de Tokio. Todos con un mismo objetivo, sobrevivir y conseguir un misterioso maletín. Bienvenidos al Shinkansen, el tren que gracias a sus más de 300 kilómetros por hora, se ganó el sobrenombre de tren bala.

Nanao tiene muy mala suerte y en su profesión eso puede resultar fatal. Nanao tiene un trabajo peculiar, es un asesino profesional. Aun así, reniega de las armas de fuego ya que con su mala fortuna estas tienden a fallar o atascarse en el peor momento. María, su contacto en los bajos fondos, le ha encontrado una nueva misión. El trabajo es fácil, subirse al tren bala de Tokio a Morioka, robar un maletín y bajarse en la primera parada.

Un trabajo sencillo para alguien con su experiencia, pero su mala suerte intervendrá una vez más complicándolo todo. Nanao en japonés, es un juego de palabras que significa “7”. En el mundillo del hampa lo apodan "Mariquita", ya que este insecto tiene siete puntos negros sobre su caparazón negro. En el Shinkansen, el tren bala japonés, viajarán cuatro peligrosos asesinos más, todos con un objetivo en común, el maletín.

Limón y Mandarina son dos asesinos atípicos. Mandarina es meticuloso y lector voraz. El otro, Limón, es un desastre andante, fan de la serie infantil "Thomas y sus amigos". Aprovechará cualquier oportunidad para hacer una analogía sobre la serie, que para él se ha convertido en el centro de su vida. Limón y Mandarina recibieron el encargo de un peligroso mafioso para rescatar a su hijo secuestrado. Su misión tiene éxito y ahora viajan en el tren con el joven y el maletín que contenía el dinero del rescate para devolvérselos a su padre.

La trama se complica cuando el hijo del jefe es envenenado y el maletín desaparece.También se apuntará un asesino apodado el Lobo, viejo rival de Nanao con ganas de ajustar cuentas. Para mayor desconcierto, una leyenda criminal conocido como “el Avispón” pondrá todo su empeño en acabar con sus rivales y cobrar la recompensa. Cinco asesinos a bordo del tren más rápido del mundo, dispuestos a recuperar el maletín a cualquier precio y sobrevivir al trayecto.

Para colmo, en el tren también viaja Satoshi, un psicópata adolescente que se hace llamar «el Príncipe». El joven se enorgullece de ser capaz manipular a cualquier persona. No sólo usa su don con los otros chicos de su escuela, Satoshi puede aprovechar su aspecto de estudiante modélico para engatusar a cualquier adulto. Busca los puntos débiles de sus víctimas y los explota para obligarles a servirle.

El Príncipe se encuentra a bordo del Shinkansen decidido a poner a prueba sus grotescas habilidades. Kimura es un hombre desesperado, un matón alcohólico con una cuenta pendiente. Su hijo ha sido empujado desde una azotea y ahora está en coma. Cuando descubre que el culpable viaja en ese mismo tren decide cobrarse la deuda de sangre y sube al Shinkansen. Pronto se verá atrapado en una trampa. El Príncipe es el culpable del estado de su hijo y se las arreglará para manipular a Kimura para enredar aún más la trama.

Nada está al azar. Una formula perfecta para un thriller de acción cargado de humor negro y momentos hilarantes. Kotaro Isako es un escritor japonés y culpable de esta novela. Tras ganar diversos premios literarios, es uno de los actuales referentes de novela negra y ficción en su país. Con Bullet Train alcanza notoriedad internacional cuando diez años después es llevada al cine.

Su reciente adaptación, con un reparto de lujo ha sido un éxito de taquilla que ha disparado la fama del autor. Bullet Train es una historia que te mantiene en vilo con una trepidante cuenta tras. En ella encontraremos las referencias más locas del Japón moderno. Hay significantes diferencias entre la película y el libro, pero ambos son iguales de atractivos. Personalmente he disfrutado mucho de ambas versiones.

Si no has visto la película ni leído el libro, ya tienes un excelente plan para este fin de semana.