CRONOPIOS. La foto: Cuckold, por Rafael Hortal



 

  

Recordemos que el candaulismo es exponer a la pareja desnuda ante otras personas con la finalidad de obtener excitación. Es como si un voyeur preparara la escena que quiere ver, pero algunos dan un paso más hasta el llamado “cuckold”, cornudo consentido. Es una fantasía sexual de la pareja cuando están solos, excitándose mientras construyen un relato de cómo sería el sexo si interviniese una tercera persona; si la pareja lo lleva a la práctica podrían elegir a la tercera persona a su gusto o dejarlo al azar con un desconocido.


La foto en la que se ve a un demonio (todos sabemos que lleva cuernos) con una chica angelical (por lo de las alas que llevan los ángeles), está realizada en una actuación performance en un festival erótico. ¿Quién le ha propuesto al otro buscar a una tercera persona para mantener relaciones sexuales? A veces las inocentes alas tienen el control absoluto de la situación y son capaces de someter a toda la corte infernal; en este caso parecía que la chica conocía el Grimorio de San Cipriano. Dejó exhausto a su amante mientras al demonio le crecían los cuernos.







Todo lo vemos desde la perspectiva social-religiosa. Tengamos en cuenta que hay sociedades en las que las relaciones no son exclusivamente entre dos personas. La poligamia en sus diferentes combinaciones ha existido en las culturas hebrea, griega o china. Otra cosa diferente son las comunas hippies, en algunas además de compartir la armonía con la naturaleza, tenían libertad sexual. Los Mosuo son una etnia china de estructura matriarcal que practica el “matrimonio ambulante”, donde las mujeres tienen la libertad sexual de ir cambiando de pareja cada noche, siempre manteniendo el respeto mutuo. 

La película “Los frutos de la pasión” (1981) es la adaptación de “Retorno a Roissy”, la segunda parte de “Historia de O”. Podemos ver cómo su protagonista, interpretado por Klaus Kinsky, encadena a su joven esposa desnuda para que observe su acto sexual con otra mujer.

El prestigioso y admirado Houellebecq, plantea en su novela “La posibilidad de una isla” cómo sería la sexualidad en una secta, pero además en su complejo universo creativo nos muestra temas de poder, filosóficos y científicos. Todo un acierto de novela y un fracaso de película dirigida por él. 

En la novela “Las edades de Lulú”, Almudena Grandes describe con detalle cómo Lulú mantiene una relación sexual con su marido y el hermano de ella.


Hay que indicar que hay relaciones de tres personas enamoradas que conviven libremente, y no por ello tienen que llevar cuernos. Son relaciones pactadas a las que no se refiere el término “cuckold”.


Recordemos lo que canta Luis Eduardo Aute en “Una de dos”:


“Una de dos

o me llevo a esa mujer

o entre los tres nos organizamos

si puede ser”



   












Comentarios

  1. Buen artículo Rafa. Me quedo con ganas de alguna otra fotografía .

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    1. Gracias. Me gustaría enseñar más fotos, pero podrían herir la sensibilidad del público (qué últimamente está muy retrógrado y le ofende todo)

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